“Lo único constante es el cambio”, es una de las frases con las que inició su presentación Tomás Dittborn, socio fundador y director general de Dittborn y Unzueta en ICARE.

Sin embargo, si no se aplica o adapta, puede llevar cuesta abajo a una empresa, o incluso a la quiebra, indicó en el Congreso Chileno de Marketing 2019: “Un Nuevo Comienzo”.

El concepto de cambio

“Si la inteligencia de las mujeres no se incorpora en el mundo de hoy, no tenemos futuro. Y si se incorpora en los directorios, en las administraciones y en estas presentaciones,  se incorpora en todo”, enfatizó Tomás entre aplausos. No es una tendencia que hay que adoptar, sino que una necesidad imperiosa, aclaró al iniciar su exposición.

El cambio es un proceso provocado, consciente, abrupto, deliberado de una situación. No es una evolución gradual que se produce en largos periodos de tiempo, sino que ocurre por un suceso específico que lo detona.

Por lo mismo, tiene que ver con eventos o situaciones, frente a los cuales se debe reaccionar. Está orientado a resultados concretos y siempre con la condición fundamental de la velocidad. “Ese es el gran diferenciador del cambio en el mundo de hoy, la velocidad es más apremiante”, dijo Dittborn.

Las cinco condiciones que impulsan hacia el éxito

Hay cinco condiciones para que un proceso de cambio pueda tener un grado de éxito:
1. El deseo de querer hacer ese proceso de cambio.
2. La habilidad para poder llevar adelante ese proceso.
3. La razón.
4. La necesidad.
5. El compromiso.

Al mismo tiempo, Dittborn dio el ejemplo de Nokia, quienes casi quebraron porque no pudieron adaptarse al cambio.

Cuando se propone hacer estos cambios, hay dos asuntos que son muy importantes: el desafío técnico y el desafío adaptativo. “Entre el 60 y el 80% de los procesos de transformación digital fracasan. ¿Por qué?”, se preguntó el fundador de Dittborn y Unzueta. Solo algunos se explican por el desafío técnico, pero la mayoría es por el desafío adaptativo.

Primero, hay que tener un modelo de negocios. Como lo fue en el caso de Corner Shop, empresa en que encontraron un modelo de negocios en que la tecnología les permitió vender algo, ejemplificó Dittborn.

¿Cómo enfrentar los cambios sin frenarlos?

Antes que todo, en el directorio, hay que pensar: “¿qué puede dejar de hacer antes de embarcarse a hacer algo nuevo? y ¿cuáles son los costos de dejar de hacer eso?”.

“Es muy complejo tener esa capacidad infinita de agregar cosas por hacer”, aclaró Dittborn. Hay que dejar cosas de lado para involucrar nuevas tareas.

Pensar en la transición es otra parte importante, especificó: “Yo creo que vamos a vivir en transición. […] Estar desafiando lo que hago para poder hacer algo nuevo permanentemente”.

Otro aspecto al que hay que estar atento es a la “zona de desequilibrio productivo”. Esto es cuando se realiza un proceso de cambio y se produce esta zona que tensiona la organización y aumenta la productividad. Es importante mantener la zona equilibrada para que no pase el límite de tensión ni el de aprendizaje, aclaró.

Y, por último, ¿cuándo? “Cuando mejor te esté yendo cambia. Cuando estés en tu peak de éxito, empieza tu proceso de cambio”, recomendó Dittborn.

“El cambio, al igual que la vida, es como una cebra: después de cada línea blanca, hay una negra y otra blanca y otra negra”, finalizó diciendo el fundador y director ejecutivo de Dittborn y Unzueta.

Revive su presentación en el video inferior.