Lograr una tasa de interés del 3% durante el segundo semestre de 2024, es una de las proyecciones más relevantes del Informe de Política Monetaria (IPoM), correspondiente a junio.

Este documento, elaborado por el Banco Central de Chile, fue presentado este jueves 22 de junio por la presidenta del organismo, Rosanna Costa, en el encuentro “Coyuntura Económica y Perspectivas”.

Jaime de la Barra, presidente del Círculo de Economía y Finanzas de ICARE, y conductor de esta instancia, calificó el informe como “un punto de inflexión en términos de política monetaria”.

Además, se expusieron análisis y proyecciones significativas en materia de crecimiento, inversión y empleo.

Inflación a la baja

“La inflación se ha tornado persistente y ha sido difícil de controlar, pero está mostrando un descenso”, explicó la presidenta del Banco Central.

Las proyecciones son alentadoras. Al cierre de este año, la inflación llegaría a 4,2% y durante el segundo semestre de 2024, se alcanzaría la meta del 3%.

Rondar estos niveles no ha sido fácil. En mayo alcanzó el 8,7%, siendo que en los meses anteriores estuvo sobre el 12% anual.

Pero ¿qué explica la baja?

La variación en los precios volátiles y la caída en los precios de los bienes, son las principales razones en la disminución de la inflación, explican desde el organismo.

Crecimiento económico

El informe de marzo arrojó que el crecimiento de la economía fluctuaría entre -0,5 y +0,5%. Sin embargo, el IPoM de junio tuvo una proyección levemente mejor: -0,5 y 0,25%.

Sobre la base de los anterior, las estimaciones para el próximo año serían entre 1,25 y 2,25%, mientras que para 2025, entre 2 y 3 por ciento.

En gran medida, la caída de la incertidumbre como shock externo explica las proyecciones más altas. No obstante, el deterioro de la situación económica global seguirá presente y afectaría también a la inflación.

Inversiones y empleo

Las importaciones de bienes de capital, las ventas de viviendas y la actividad de la construcción están afectando el rendimiento de las inversiones.

De hecho, el déficit de la cuenta corriente acumulado en doce meses se redujo desde 9% del PIB hasta 6,9% del PIB, en el IPoM de junio.

Esta caída se registró a fines de 2022 y durante el primer trimestre de este año, haciendo que fuera mayor que la esperada.

En materia de desempleo, la tasa registró 8,7% en el trimestre febrero-abril, mientras que los salarios presentan bajo dinamismo producto de la inflación.

Por último, la tasa de creación de nuevos puestos de trabajo sigue baja. En gran medida el mercado ha presentado movimiento desde los asalariados formales hacia las ocupaciones por cuenta propia y asalariados informales.