
El ministro de Hacienda, Felipe Larraín, inició la ronda de exposiciones de la primera sesión de ENADE 2018, “Desatar la energía del desarrollo en Chile”. Su presentación estuvo marcada por un análisis del panorama económico nacional y por los detalles de la hoja de ruta de su cartera que busca atraer las inversiones e impulsar el crecimiento del país.
Según el ministro Larraín, Chile está viviendo un proceso de recuperación y se encuentra en una posición positiva en comparación con otros países. “Chile, después de cuatro años, vuelve a crecer más que el mundo”, sostuvo en relación a que se espera que el crecimiento continúe al alza y llegue al 4% anual.
Frente a esto, plantea que ahora nuestros referentes económicos son otros. “Si crecemos al 1,5 anual, en 2030 tendremos el PIB per cápita de Turquía. Si lo hacemos al 3%, el de Portugal. Y si crecemos al 4,5% anual, tendremos el PIB per cápita de Nueva Zelanda que ya es un país desarrollado. Es interesante mirarlo como norte”, afirmó el ministro de Hacienda.
Ahora bien, ¿qué ha impulsado esta situación? Varios factores que el ministro explicó de la siguiente manera:
A partir de los anterior, el ministro compartió cuáles son los ejes de la agenda a largo plazo en un escenario con la productividad al alza y ante la denominada IV Revolución Industrial. Estos son:
Adaptar el mercado laboral a los nuevos modelos de negocios.
Sin embargo, para lograr esto, es necesario, primero, posicionar a Chile como un centro financiero a nivel regional y mundial, explicó el jefe de Hacienda. Con este objetivo en cuenta, dio a conocer que existe una nueva mesa para administrar fondos extranjeros desde el país, fomentar la participación de inversionistas en el mercado local e incentivar la emisión de valores.
A lo anterior, agregó que las expectativas del PIB tendencial a 2021 es de 3,1% y que la meta es que en 2030, el país sea uno desarrollado. “Si nosotros estamos juntos, vamos a sobrevivir”, cerró Larraín.
Al finalizar su participación, retomó el lema de ENADE 2018, “Ubi concordia, ibi victoria”, es decir, “Donde hay concordia, hay victoria”, e invitó a todos los sectores a trabajar en conjunto por el desarrollo del país.