Puede que hoy día no exista aspecto alguno de nuestra vida que sea ajeno a los datos.

Básicamente, casi todo lo que nos rodea es medible, convirtiendo los datos en pilares sobre los cuales construir soluciones y acciones a determinadas situaciones.

Esa visión fue la que le permitió a la Agencia de Igualdad de Género en el Lugar de Trabajo, en Australia, ahondar en el tema de la equidad entre hombres y mujeres, con el propósito de balancear la cancha, laboralmente hablando.

Libby Lyons, directora de la Agencia, detalló su trabajo en «Equidad de género en números: la experiencia en Australia».

Dicho encuentro, organizado por ICARE y encabezado por su Director, Hans Eben, contó con el apoyo del embajador de Australia en Chile, Robert Fergusson, y la participación de Verónica Campino, vicepresidenta de la Fundación ChileMujeres, y Jean des Rivieres, Vice President Exploration Copper de BHP.

«Las estadísticas muestran que estamos avanzando»

Lyons lidera una organización que surgió en el marco de la Ley de Igualdad de Género en el Trabajo (2012).

Independiente del Gobierno australiano, la Agencia realiza un proceso legal de presentación de informes, recopilando datos sobre igualdad de género.

Estos informes cubren a más de cuatro millones de empleados en Australia, alrededor del 40% de la fuerza laboral.

«Más que nunca se está influyendo sobre el tema de género […] Las estadísticas muestran que estamos avanzando«, afirmó Lyons.

En ese sentido, resaltó que pasar de la estrategia a la acción les ha permitido alcanzar ciertos objetivos.

«Cerca del 70% de los empleadores tienen políticas de equidad y hay un gran compromiso en las acciones», apuntó Lyons.

Asimismo, recalcó que, más allá del rol regulador de la Agencia, trabajar con los empleadores ha dado buenos resultados.

Entre los empleadores australianos se ha consolidado la tendencia de presentar informes y datos anualmente, lo que, según Lyons, ha permitido lograr una tasa de cumplimiento del 98%.

Otro importante dato que destacó la experta es que 39% de los cargos directivos en Australia son ocupados por mujeres.

Según ella, la brecha de género va más allá de equiparar los salarios, es también abrir más oportunidades para que mujeres ocupen puestos en alta gerencia.

Seis indicadores para aplicar «el método australiano»

Lyons señaló que, obedeciendo a lo establecido en la Ley de Igualdad de Género en el Trabajo, las empresas privadas con más de 100 empleados deben presentar un informe anual a la Agencia.

Dicho documento permite hacer una evaluación partiendo de seis indicadores:

1 – Composición de la fuerza laboral.

2 – Composición del directorio.

3 – Remuneración.

4 – Flexibilidad laboral y apoyo para el cuidado de hijos o familiares.

5 – Orientación laboral entre empleados y empleadores.

6 – La existencia de acoso y discriminación sexual.

De estos seis puntos, Lyons enfatizó en el cuarto y recalcó que «hay que normalizar el trabajo flexible».

Para ella, la clave del aumento en la participación femenina en cargos de liderazgo está en trabajar sobre este aspecto.

Decálogo para el cambio

Aunque se trata de un aspecto fundamental, la flexibilidad por sí sola no basta para generar un cambio.

En ese sentido, Lyons expuso un decálogo establecido a través de una investigación de la Agencia, el Consejo de Negocios de Australia y la consultora McKinsey & Company.

1 – Construir un argumento sólido para el cambio.

2 – Crear un compromiso con la diversidad, incluyendo a los socios.

3 – Rediseñar roles y trabajar para permitir la flexibilidad laboral.

4 – Promover activamente la participación femenina.

5 – Determinar un claro objetivo de diversidad, con rendición de cuentas.

6 – Apoyar el talento durante las transiciones propias de la vida.

7 – Asegurar que la infraestructura sea acorde para apoyar un ambiente más inclusivo y flexible.

8 – Desafiar las miradas tradicionales de mérito en la etapa de reclutamiento y evaluación.

9 – Invertir en capacidades de líderes de primera línea para guiar un cambio cultural.

10 – Impulsar a mujeres prometedoras y asegurar experiencia en roles clave.

Espacio para la discusión

La intervención de Lyons dio paso a un panel de conversación en el que se discutieron elementos de su presentación.

Des Rivieres, Campino y Lyons respondieron a las preguntas que surgieron desde el público que fue parte de este encuentro.

Para la vicepresidenta de la Fundación ChileMujeres es importante que en Chile se hagan hacer diagnósticos correctos sobre este tema.

«Debemos aprovechar el rol de líderes en las organizaciones para actuar en el problema de la equidad de género», apuntó Campino.

Por su parte, Des Rivieres destacó el impacto de las mujeres en una industria etiquetada de masculina como la minera.

Como ejemplo, el vicepresidente de BHP destacó que en la Mina Spence, en la región de Antofagasta, los equipos con mayor diversidad tienen un 75% menos de incidencias.

Al finalizar, Lyons puntualizó que las organizaciones deben hacer un correcto análisis de las estadísticas para crear «sus propias recetas» en el objetivo de aumentar la equidad de género.